Mostrando entradas con la etiqueta fiestas. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta fiestas. Mostrar todas las entradas

jueves, 3 de enero de 2013

Oaxaca de Juárez

Pasada navidad regresé al df a recoger a Rodo del aeropuerto. Me llevé para leer el libro de Cesar Aira Yo era una niña de siete años y me lo acabé. Tuve suerte porque aunque había una fila de autos de 15 kilómetros por la construcción del estadio de Puebla, el chofer fue advertido a tiempo y tomó una ruta alterna que nos retrasó una hora pero nos hizo llegar sanos y salvos. Dejamos las cosas en casa de Inés y nos fuimos al Walmart a hacer compras, tomamos unas cervecitas y al sobre. Al día siguiente salimos hacia el centro, el zócalo estaba ocupado con la pista de hielo así que no fue tan impresionante la salida desde el metro como me pasó a mí la primera vez que llegué a México (hace siete años atrás), pero igual le gustó a Rodo. Fuimos a Palacio Nacional a ver los murales y una exposición del acervo de la Secretaría de Hacienda que nos gustó mucho, luego pasamos a la Catedral, al Museo del Diseño que tenía una exposición de un concurso de plata, almorzamos en el Salón Corona, seguimos camino hacia el Sears frente a Bellas Artes por un café pero todo estaba lleno, lo mismo ocurrió en el Sanborn de los Azulejos, así que decidimos tomar el metrobus hacia casa de Oli, ahí tomamos el café y de paso la visitamos un ratito. Regresamos a casa por las cosas y nos fuimos a Taxqueña. Casi nos morimos de frío en el bus (Rodo ha rebautizado el gl como el gélido). Al llegar a Oaxaca el viernes desayunamos y nos fuimos al centro, estuvimos en el Llano, en el museo de Santo Domingo, almorzamos en Casa de la Abuela con Kazt, Tatiana, Nina y mi tía Martha. Tomamos el cafecito en San Pablo y luego nos fuimos a ver la catedral y anduvimos por el andador turístico hacia el Hub a rentar nuestra bici para pasear en la noche. Las estuvimos probando y me sentía insegura pero luego de un buen rato que empezó el recorrido ya me sentí tranquila, aunque me gustaba que habían muchos niños en el recorrido, a la vez se metían un poco imprudentemente y temía que me hicieran caer y eso pasó, solo fue un golpe pero fue fuerte. Regresamos a casa muy cansados pero nos gustó mucho. El sábado fuimos al mercado de las artesanías y luego al mercado 20 de Noviembre y Juárez, compré algunas blusas y otras cosas, lo mismo Rodo una guayabera y regalitos. Nos encontramos con mi tía para comer en el Zócalo, ahí reservamos nuestra noche de año nuevo en el Terranova. Tomamos el café en la Brújula y ahí se nos unieron Juanita y Beto. De ahí fuimos a la casa de las artesanías y luego al Txaraparta que es un bar muy lindo. El domingo teníamos el tour al Tule, Teotilán del Valle donde Rodo se compró un tapete con el motivo del árbol de la vida, luego a Hierve el Agua que nunca había visitado antes y me gustó mucho (en la foto), lo malo es que el camino tiene muchas vueltas y me mareé horrible, aunque yo suelo ser muy fuerte para esas cosas. Volvimos para comer (nuevamente el camino estuvo infame), de ahí pasamos a Mitla y finalmente a la destilería de mezcal. En la noche jugamos tren con mi tía Martha y tomamos todo lo que había en casa (sangría, ponche). El 31 nos fuimos al tour de Monte Alban, primero ese centro arqueológico, luego Cuilapan de Guerrero, almuerzo, Arrazola y San Bartolo Coyotepec. Rodo compró varias cosas también. Llegamos tardecito justo para bañarnos y volver a salir hacia el zócalo. La cena y los fuegos artificiales estuvieron chéveres, así que la pasamos bien. Todo el primero nos la pasamos vegetando en casa, jugamos tren otra vez. El martes bajamos al centro para ir a la iglesia de Santo Domingo, al Museo de los textiles oaxaqueños que tenía una exposición de zancos (pero bien poco de textiles), almorzamos en la Biznaga (delicioso) y luego fuimos al café en el Arábica, ahí nos encontramos otra vez con Beto y Juanita, de ahí dimos una vuelta y regresamos a casa a jugar tren. El miércoles nos fuimos tarde, luego de haber dejado maletas hechas, fuimos a San Pablo, luego al mercado de artesanías, a comer tlayudas y torta de amarillo, pasamos por el mercado por un tejate y otras cosas ricas para llevar como poleo y cacahuates. Fuimos a la Basílica de la Soledad y a la Casa Juárez, volvimos al andador turístico para la despedida y volvimos a casa antes de partir al df.

martes, 25 de diciembre de 2012

Diciembre

El mes se pasó tranquilo, celebramos el cumpleaños de mi tía Martha en el 100% Natural con una sangría deliciosa y unos piqueos (botanas) de humus y de jocoque que me gustaron mucho. Nos estuvimos engriendo varios días, comiendo rico sobre todo. Luego fuimos a ver la película del Hobbit que estuvo muy bien, me hizo acordar varias cosas de El señor de los anillos, aunque fueron más las que me di cuenta que había olvidado.  En el Hub vi Elefante blanco que me deprimió bastante, pero es interesante saber de los pueblos jóvenes en Buenos Aires, sobre los que yo no había oído hablar. Se encendió la alarma de temblor cuando estaba en la película pero nunca hubo ningún movimiento telúrico, fue extraño. También estuvimos en la posada del Hub que estuvo muy divertida y hubieron muchas cosas ricas, nosotras preparamos el ponche, que también nos quedó deli. Finalmente mi tía pudo retomar la natación así que estuve acompañándola, una vez nos tocó el agua helada, pero luego ha estado temperada y rica, aunque el clima más bien se ha enfriado bastante y ha hecho difícil encontrar el entusiasmo para entrar a nadar (e incluso a bañarse). La casa ya quedó mejor, ya vinieron a limpiar dos veces, ya se arregló lo del gas y lo del agua, así que todo está más ordenado y mejor. Una noticia triste fue que falleció Mercedes Barquet, me apenó mucho porque tuve la suerte de conocerla cuando estudié en el Colmex y siempre fue una persona muy amable, aunque con nuestro grupo en general creo que hubieron varias diferencias. A veces creo que uno nunca le da a las personas su justa medida, no importa que pasen de lado o de frente por nuestras vidas, siempre hay algo que es enriquecido, aprendido por los otros y que pasamos por alto. Supe que estaba ya muy mal de cáncer así que espero que esta partida haya sido por su tranquilidad y paz. Llegó la noche previa a Navidad que es Noche de rábanos, ese día se presentan en el zócalo esculturas en rábanos (en la foto), también en flores siemprevivas y en la hoja del choclo (la panca). Estaba muy emocionada por verlo y la verdad que es muy lindo. Vimos a Toni y Gaby un par de veces y vinieron a pasar navidad con nosotras en casa. Lucía llegó también a Oaxaca así que nos fuimos de paseo con ella, su mamá, una amiga de ella y Margo Glantz que estaba también por ahí con su hija. Nos fuimos a la casa de la cultura de San Agustín Etla, también llamada Casa Toledo. Estuvo muy bueno el paseo, también lo estuvo el conversar con ellas y ver a Lucía. Acabé el libro de Lydia Davis de sus cuentos completos que me gustó mucho, voy a empezar el de Alice Munro, Las lunas de Júpiter.

domingo, 23 de diciembre de 2012

Feliz Año 2013

Que el día los ilumine
que la noche los abrigue
que a cada paso encuentren siempre un camino
que ante el camino hallen posibilidades y aprendizajes
que los aprendizajes lleguen con alegría
que la alegría se duplique a cada paso
a cada día
a cada noche
que vibren con el universo
que el universo despierte en ustedes

jueves, 10 de mayo de 2012

Homenajes y despedidas

El jueves no voy a la piscina porque estoy muy cansada, tengo mi cita con Fryné, me quedo en la oficina avanzando varias cosas hasta la noche que tengo que presentar La teta asustada de Claudia Llosa en el Perú Film Festival, lo hago en inglés. La veo nuevamente, me sigue gustando. El viernes dicto temprano luego me encuentro para almorzar con Marta y conversamos un buen rato y comemos rica comida thai. En la tarde es el cierre del festival de cine así que estoy ahí muy temprano, me vuelvo a encontrar con Gladys, llegan Paty, Anna, Katia. Primero pasan el documental Lunamarca, que no lo había visto y luego Paraíso que vuelvo a ver, tenemos conversación con el director Héctor Gálvez. De ahí pasamos al cóctel en el que hay pisco, cerveza (Cristal y Cuzqueña), vino, además de combinado de papa a la huancaína, arroz con pollo y escabeche de pescado. De ahí salimos un ratito por una cerveza extra pero nos vamos a casa, es muy tarde para ir a la fiesta en casa de Kadiri porque es casi media noche. Temprano me voy a mi clase de spinning, la última, que sale muy buena. El lunes termino de corregir los impuestos que había hecho mal y en la noche vamos a la presentación del segundo número de Latin Lover. Vamos hasta Queens donde queda el Amaru Pisco Bar. La presentación sale muy bien y hay pisco y cervezas a discreción. Así que al día siguiente es bien difícil levantarse para ir a dictar, felizmente es la última semana de clase y mis alumnos tienen que practicar para su prueba oral. Recogemos las revistas que mandamos a imprimir, como algo y de ahí me voy a casa a dormir. El miércoles otra vez español temprano, en la tarde yoga y luego al Arthur's Tavern con la clase de Antonio para cerrar. Terminamos llenando toda la taberna y oímos a la misma chica que solíamos ver Rossy y yo en nuestro segundo semestre cuando empezamos a ser amigas. Es gracioso darse cuenta cómo el tiempo es circular, concéntrico, en espiral. El jueves tengo mi cita con Fryné y en la tarde es el evento que organiza la maestría junto con el Pen, así que vienen los poetas y nuestros compañeros leen sus traducciones, sale súper bien y me encantan muchos de los autores que escucho en inglés, aunque no soy muy fan de leer en inglés. De ahí seguimos conversando y celebrando, ya todos invadidos de la nostalgia de la partida. El viernes voy a mi última clase de español del semestre, más tarde al yoga y luego al homenaje que le hace el departamento de español a Sylvia Molloy. Viene Diamela y varios otros escritores y académicos conocidos, es muy emotivo. El sábado sigue todo el día el evento de Sylvia, almuerzo con Patty en el lugar coreano una sopita de fideos picosa, luego vuelvo al evento, concluye con la lectura de Sylvia de algunas partes de su último libro (foto abajo), un diario sobre París, que está buenísimo y un aplauso de pie de todo el auditorio, termino llorando. Al acabar nos vamos directo para casa de Mariana donde hay parrillada prenostálgica. La pasamos súper bien ahí, llegan todos nuestros profes: Mariela, Lila y Sergio. Al día siguiente voy con Cristina a ver The Caretaker de Harold Pinter porque Manuel no se pudo levantar. El lunes doy asesoría a una de mis alumnas sobre los acentos en el español, luego voy a la última clase con Antonio y de ahí vamos todos a la lectura final, tristes y alegres a la vez. La lectura sale muy linda, luego nos invita Lila a su casa. Vienen a verme Melina, Stalin, Anna y Patty y eso me hace muy feliz. El martes descanso casi todo el día, a la noche vamos con Salva a la despedida de la ópera, vemos The Makropolus Case, una ópera moderna en checo que nos gusta bastante, excepto por los largos descansos que nos cansan. El miércoles cierre del semestre, tomamos examen en la mañana, pasamos las notas. Aprovechamos de recoger nuestras entradas para la graduación, también el ajuar del graduado (que no sabemos cómo ponernos), vamos al yoga y de ahí a la celebración del fin del semestre. Hay menos gente, me parece que hay menos gente cada año. Regreso a casa a ponerme al día en mil pendientes triste por estos festejos y despedidas, aunque también contenta pensando en el futuro.

sábado, 31 de diciembre de 2011

Chau añito viejo, ¡hola 2012!


El viernes vamos a Minka con mi mamá para hacer las compras de la semana, nos encontramos con mi tía Martha en Maranga y la jalamos. En la noche voy a recoger a Rubén al aeropuerto, el aeropuerto está llenísimo, apenas encuentro sitio para estacionar y hay miles de personas esperando. El vuelo se atrasa pero solo media hora. Salimos y pasamos al Bembos. El sábado hacemos algunas compras de último minuto en la mañana, luego cocino el arroz que me toca. Llega mi tío Pepe, nos ponemos a conversar. Nos vamos a Maranga para encontrarnos con el resto de la familia y cenar. Regresamos en la noche a abrir regalos. A mi mamá le dan un libro de los mejores restaurantes de Lima, se vuelve nuestra biblia inmediatamente. El domingo voy a casa de mi papá, estamos ahí y luego nos vamos al cine a ver Cuento Chino de Sebastián Borensztein con Ricardo Darín. El lunes intentamos comer lomo saltado pero todos los lugares a los que queremos ir están cerrados, así que comemos en casita guisito de habas y guisito de frejolito verde. En la noche vamos a ver a Rodo a su casa, la pasamos muy bien tomando pisco sour catedral. El martes nos vamos a Punto Azul, después de varios intentos fallidos previos, comemos ceviche, arroz chaufa y un maki de trucha delicioso. En la tarde vamos con mi tía Martha a caminar por el malecón y luego al Virrey y a La Baguette, yo me tomo una hierbaluisa porque sigo llena. El miércoles nos vamos a La Mar a comprobar si de verdad venden el mejor ceviche ahí, como dice nuestra biblia y no, aunque tampoco está mal. Comprobamos que la biblia se equivoca. De ahí pasamos por Dédalo, vamos un ratito a Plaza San Miguel pero no encontramos los zapatos para Rubén y volvemos a casa. El jueves nos vamos a Lince a comprar lentes, luego al Mali, vemos la exposición de Francis Alys, Fernando Bryce y una de arquitectura prehispánica muy interesante. Luego caminamos por el Jirón de la Unión, sin éxito con los zapatos pero encontramos unas sayonadas. Almorzamos en Pardos Chicken, nos hacemos una caricatura, luego vamos a casa a dejar las cosas y a Plaza San Miguel. Ahí nos encontramos con Gustavo y Diana, nos vamos al restaurante del Peruano Japonés, K'tana, comemos muy rico y conversamos hasta tarde. El viernes viene Rocío a casa con Cuau y Joaquín, luego vamos al Museo del jueguete en Miraflores, ahí también nos encontramos con mi papá, pasamos a Vladi por un juguito, tomo jugo de aguaymanto que está delicioso. De ahí visitamos a Rocío en su casa y vamos a tomar algo a la Bodega D. Llegamos rendidos a casa. El sábado nos vamos a almorzar con mi papá, buscamos zapatos en el Jockey Plaza sin éxito, vamos al mercado y regresamos a casa con muchos discos de películas y todo para hacer pizza, previendo que el primero estará todo cerrado. Descansamos mientras llega la hora de ir a casa de Dafne a recibir el año.

martes, 4 de enero de 2011

2011


El lunes fui al gimnasio, tuve evaluación física y como era de esperar me dijo César que había perdido tono muscular, claro que también peso, pero que había que fortalecer y cambiar grasa por músculo, así que me mandó una nueva rutina. Después de desayunar me fui al dentista, pasé un rato por la exposición de los trabajos de los presos en el ICPNA de Miraflores, vi un ratito a mis hermanos ahí, pero de ahí me fui a la notaría y a la municipalidad. Como seguía con la tos, cada vez peor, el martes fui al mercado temprano y me compré mis hierbitas para empezar el tratamiento de una vez (quienes no sepan es huira huira, borraja y muña, se hierve en un litro y medio de agua y se toma tres veces al día por siete día, al tomar caliente, se le pone además tres hojas de hojas de geranio). Almorcé con mi papá y regresé a hacer compras con mi mamá porque se malogró la refrigeradora y como era la segunda vez ya no valía la pena volverla a reparar. El miércoles nos fuimos a Minka para comprar todo lo de la cena de navidad y en la tarde otra vez al dentista. El jueves ya me dolía un poquito todo de la nueva rutina, desayuné con Inés en su casa, pudimos conversar un rato al menos, de ahí me fui a Runa para el almuerzo de fin de año y el intercambio de regalos. En la tarde fui al aeropuerto a recoger a Rubén, había un tráfico terrible y me demoré un montón. Dejamos las maletas en el depa, nos bañamos y cambiamos porque hacía bastante calor. Fuimos a ver Los músicos ambulantes con Joel y Alexis. De ahí los embarcamos y nos fuimos con Danilo e Inés. Rubén tenía hambre así que pedimos pizza del Dinno's pero no estuvo tan buena como otras veces. Nos acostamos relativamente temprano porque todo el mundo andaba cansado. Danilo e Inés partían al día siguiente para España. Nosotros nos levantamos también temprano y fuimos a desayunar con mi mamá. De ahí fuimos al mercado por algunas cosas que faltaban para la cena. Almorzamos en casa y nos fuimos para Plaza San Miguel a comprar regalos que nos faltaban, estaba súper lleno, pero íbamos con paciencia. Preparé el arroz y ayudé con otras cosas en la cocina. En la noche llegó mi tío Pepe, Belissa, Jhony que llegó tarde, Fiorella, Francisco, Alexis y Joel, así que cenamos temprano, jugamos pictionary y luego los niños reventaron cohetes y abrimos los regalos. El sábado nos levantamos tarde y no desayunamos, seguíamos llenos de la cena. Nos fuimos con mi papá y pasamos el día ahí, nos invitó también lo de la cena: pavo (que yo no comí), arroz árabe, puré de manzana y ensalada. Al final panetón. Hicimos competencia y es más rico el Donofrio aunque Rubén diga que el San Antonio. Mi papá nos dejó en el Jockey Plaza y fuimos a ver Harry Poter y las reliquias de la muerte. Como yo ya sé la historia fue solo recordar y sí me dio miedo un poquito. Rubén pidió inmediatamente que le prestara el libro para completar la historia que se quedó a la mitad en la película. El domingo desayunamos en casa con mi mamá y de ahí fuimos al artesanal de Miraflores, almorzamos en el Mamá Lola. De ahí tomamos cafecito con churros con Rocío en el Manolo's. Y nos encontramos con mis primos y mi mamá para ver Tron en 3D. Estuvo chévere, yo no conocía la historia anterior, pero Rubén me contó y sí me gustó bastante. El lunes quisimos ir al Real Felipe pero aunque la web decía que estaba abierto estaba cerrado, así que hicimos un viaje a la china por las puras. Fuimos al artesanal a recoger unas cosas y volvimos al Callao para que Rubén comiera parihuela en Mateo. Le encantó. De ahí nos encontramos con Conce en Plaza San Miguel. El martes almorzamos con mi papá, queríamos ir al Punto Azul pero salimos tarde porque llegó el del teléfono y el técnico de la lavadora. Así que fuimos a otro restaurante que no resultó tan bueno. Después del cafecito y de otro crucigrama, mi papá nos llevó a Larcomar. Ahí vimos Una propuesta indecorosa de Aton Egoyan que a mí me gustó y Rubén dijo que no entendió nada. Es cierto que hay muchos vacíos, pero es el estilo del director creo yo. El miércoles fuimos a Gamarra a comprar ropa interior y de ahí al Estadio a almorzar con Rodo, tomamos el cafecito en el Tanta y regresamos a casa para preparar todo para la playa. El jueves salimos temprano para Asia, nos paró la policía y no teníamos SOAT, se había vencido y nadie se había dado cuenta. Felizmente lo compramos al toque y el policía nos dejó ir. La playa estuvo bien aunque estaba brava y el clima nublado, hasta frío. La pasamos tranquilo allá, leyendo, durmiendo, comiendo, paseando, jugando burako con Zoila, Chaska, Daniel y Susana. Rubén acabó el último libro de Harry y yo estoy por acabar Me llamo rojo. La víspera de Año Nuevo hicimos fogata y recibimos todo juntos, comimos las uvas, brindamos con champaña. El 2 desayunamos en La baguette en el boulevar, ahí nos encontramos con Laura y Sandro. Ese día que nos regresamos salió un sol fuerte, así que nos tostamos un poco. Nos vinimos directo por unos anticuchos en La norteña. El lunes desayunamos con mi papá en San Antonio. De ahí fuimos al artesanal por cositas que faltaban, regresamos a casa, preparé ají de atún. Almorzamos en la terraza con Gaby, Jesús y Belén. Tomamos cafecito con panetón. Nos fuimos a Dédalo por un reloj que sí encontramos y de ahí a Las brujas de cachiche por un pisco sour que Rubén casi se va sin tomar ninguno. Así que ahora empiezo mi rutina de este nuevo año. En la foto, un atarder en mi Lima bella.