jueves, 24 de mayo de 2012

Despedidas

El jueves voy a visitar a Gabriela, estamos con ella un rato y de ahí volvemos caminando por el Riverside Park, el día está soleado y lindo. Seguimos en la búsqueda de zapatillas porque las que mi mamá trajo murieron en el intento. Al menos compró unas sandalias para caminar pero cuando hace frío mejor es la zapatilla. Almorzamos en Amber comida sushi. En la noche nos encontramos con su amiga Nancy del colegio y nos lleva al Empire State, yo no tenía intención de ir, no estaba en mi lista de pendientes, pero lo disfruté mucho, aunque hubo una cola muy larga igual fue muy bonito ver la ciudad desde las alturas, la cogimos justo al anochecer, hubiera estado mejor ver el sunset pero con la cola que había fue imposible llegar más pronto a la cima. Al salir tomamos un cafecito y de ahí nos fuimos a casa. El viernes nos vamos tempranito a Croton-Harmon con Marguerite, hacemos una caminata con Diane por el río, un ligero almuerzo muy rico, descansar en casa, disfrutar el paisaje y el sol y luego una vuelta por la represa, pero por abajo, todo muy lindo. Volvemos a la ciudad y seguimos en la búsqueda de zapatos. El sábado vamos temprano al Museo del Barrio, vemos la exposición permanente, lamentablemente no hay tour ni hay exposiciones temporales en ese momento, así que yo misma llevo a mi mamá por el Spanish Harlem, de ahí comemos en El paso comida mexicana muy buena y salimos volando para ir a ver El fantasma de la ópera. La verdad que iba con bien pocas ilusiones pero me gustó mucho, los artistas son de primera, el escenario muy bien hecho, los vestidos, las voces, un teatro lindo. Luego a Nueva Jersey a ver a los Andía. Después de desayunar con mi tía Blanca, mi tío Carlos nos lleva a tomar el bus para volver a Nueva York e irnos a Spuyten Duyvil para visitar a Gladys. Almorzamos con ella muy rico, conversamos, disfrutamos la tarde que sigue soleada. Al volver a la ciudad nuevamente vamos por zapatillas pero esta vez sí tenemos éxito, al fin. El lunes amanece lloviendo, tengo cita con Fryné, vamos a ver tiendas y vamos a comer al nook donde comemos sopita de tomate y humus. Visitamos a Gabriela de nuevo, estamos con ella la tarde hasta que nos vamos al Arthus Tavern para despedirme del jazz, pasa Patty un rato por ahí también. El martes desayunamos con Nancy en el Arte Café y como mi mamá se siente un poco cansada nos quedamos en casa hasta la tarde que voy a mi oficina a borrar mis archivos de la compu, sacar lo que me falta y entregar la llave. Después de eso vamos a McNally a la presentación del libro de Sergio, la presentación me gusta. En la noche mi mamá se siente mal y se levanta el miércoles con faringitis así que empieza su cura del limón. En la noche voy a casa de Elvira que es su cumpleaños, me encuentro con Cristina para ir juntas. El jueves seguimos en casa, el día está igualmente muy lluvioso y con truenos, mi mamá sigue con la cura de la naranja. Lo malo es que también su ojo se ha infectado, pero el descanso seguro que le hará recuperarse pronto.

jueves, 17 de mayo de 2012

Graduación

El jueves voy a la universidad a ponerme al día en los pendientes y para empezar a recoger las cosas de mi oficina. Voy a clase de yoga, me reúno con Mariela para hablar del proyecto de un libro sobre Carmen Ollé que empezamos hace tiempo y se abandonó, así que retomamos el tema. Me da tiempo de hacer varios pendientes, hacerme las uñas y los pies de morado (color nyu). El viernes tempranito voy a recoger a Rubén al aeropuerto, como andamos con las justas, compramos un bagel y un café y lo vamos comiendo en el metro, eso es típicamente newyorkino así que le digo que lo tome como parte de las atracciones turísticas. Llegamos a casa para cambiarnos y salir corriendo al Lincoln Center donde será la ceremonia de graduación, ahí me encuentro con Manuel, Pedro y Claudia. La ceremonia es bonita pero larga. Marguerite y Reid también van pero se tienen que retirar antes de que acabe porque tienen compromiso para almorzar. Al salir hace un sol muy bonito, vamos al Amber por sushi. Nos cambiamos y vamos a dar un paseo por el puente Brooklyn y por el malecón de ese lado. Descansamos un rato para poder salir otra vez a encontrarnos con Mikaela y Jesús en un bar cubano llamado Havana, la comida está muy buena. Me da gusto ver a Mikaela después de tiempo y casi al final del viaje considerando que ella fue la que me recibió. Nos vamos para el JFK otra vez para recoger a mi mamá. Llegamos de madrugada y muy agotados, así que directo al sobre. El sábado tomamos un juguito en el Juice Generation, el de acahí que me encanta, de ahí cafecito y sándwich en el Arte Café. Nos vamos para Chelsea, vemos la exposición de Richard Avedon, luego vamos al Highline que nos gusta mucho, el día es soleado y es rico pasear por ahí. Lo recorremos todo, luego vamos por la 34 a ver unas tiendas pero volvemos a Chelsea para comer pizzas en Co. Es buena la combinación que hacen. Regresamos a casa un rato y luego vamos al Arthur's Tavern para que Rubén conozca el lugar. Solo estamos un rato porque andamos agotados. El domingo tempranito salimos para New Jersey, nos encontramos con mi tía Luz y buena parte de los Andía. Desayunamos a la peruana con chicharrón y morcilla (yo como solo huevito con pan), de ahí volvemos a Nueva York a hacer compras. Mi mamá se queda por allá. Almorzmos en Shakeshack que resulta tener unas excelentes hamburguesas. Volvemos a casa para hacer maletas y Rubén se va de regreso a México. El lunes es día de descanso y compras cerca de casa, retomo mi trabajo un poco. En la noche vamos al Arthur's para oír a los Grove Street Strompets y ahí nos encontramos con Mariana y sus papás. El martes está lloviendo así que salimos solo cerca de casa a ver tiendas y luego vamos a los Graduation Alley, donde me regalan una bolsa y nos dan dulces y comida. Ahí nos vemos con Cristina, Pedro y Ana. El miércoles es la graduación, aunque dice que va a llover al final no llueve, hace calor y el día está rico, nos vamos tempranito al metro, nos vemos con Cristina, Pedro y su familia. Llegamos al estadio y ahí nos juntamos con los demás. La ceremonia es divertida y es bueno estar todos juntos. Regresamos a casa con un calorón para cambiarnos, luego vamos a casa de Odi que nos invita una rica cena. La triste noticia es que Carlitos García Miranda falleció esa misma mañana. Un homenaje para ti, dedo crítico.

jueves, 10 de mayo de 2012

Homenajes y despedidas

El jueves no voy a la piscina porque estoy muy cansada, tengo mi cita con Fryné, me quedo en la oficina avanzando varias cosas hasta la noche que tengo que presentar La teta asustada de Claudia Llosa en el Perú Film Festival, lo hago en inglés. La veo nuevamente, me sigue gustando. El viernes dicto temprano luego me encuentro para almorzar con Marta y conversamos un buen rato y comemos rica comida thai. En la tarde es el cierre del festival de cine así que estoy ahí muy temprano, me vuelvo a encontrar con Gladys, llegan Paty, Anna, Katia. Primero pasan el documental Lunamarca, que no lo había visto y luego Paraíso que vuelvo a ver, tenemos conversación con el director Héctor Gálvez. De ahí pasamos al cóctel en el que hay pisco, cerveza (Cristal y Cuzqueña), vino, además de combinado de papa a la huancaína, arroz con pollo y escabeche de pescado. De ahí salimos un ratito por una cerveza extra pero nos vamos a casa, es muy tarde para ir a la fiesta en casa de Kadiri porque es casi media noche. Temprano me voy a mi clase de spinning, la última, que sale muy buena. El lunes termino de corregir los impuestos que había hecho mal y en la noche vamos a la presentación del segundo número de Latin Lover. Vamos hasta Queens donde queda el Amaru Pisco Bar. La presentación sale muy bien y hay pisco y cervezas a discreción. Así que al día siguiente es bien difícil levantarse para ir a dictar, felizmente es la última semana de clase y mis alumnos tienen que practicar para su prueba oral. Recogemos las revistas que mandamos a imprimir, como algo y de ahí me voy a casa a dormir. El miércoles otra vez español temprano, en la tarde yoga y luego al Arthur's Tavern con la clase de Antonio para cerrar. Terminamos llenando toda la taberna y oímos a la misma chica que solíamos ver Rossy y yo en nuestro segundo semestre cuando empezamos a ser amigas. Es gracioso darse cuenta cómo el tiempo es circular, concéntrico, en espiral. El jueves tengo mi cita con Fryné y en la tarde es el evento que organiza la maestría junto con el Pen, así que vienen los poetas y nuestros compañeros leen sus traducciones, sale súper bien y me encantan muchos de los autores que escucho en inglés, aunque no soy muy fan de leer en inglés. De ahí seguimos conversando y celebrando, ya todos invadidos de la nostalgia de la partida. El viernes voy a mi última clase de español del semestre, más tarde al yoga y luego al homenaje que le hace el departamento de español a Sylvia Molloy. Viene Diamela y varios otros escritores y académicos conocidos, es muy emotivo. El sábado sigue todo el día el evento de Sylvia, almuerzo con Patty en el lugar coreano una sopita de fideos picosa, luego vuelvo al evento, concluye con la lectura de Sylvia de algunas partes de su último libro (foto abajo), un diario sobre París, que está buenísimo y un aplauso de pie de todo el auditorio, termino llorando. Al acabar nos vamos directo para casa de Mariana donde hay parrillada prenostálgica. La pasamos súper bien ahí, llegan todos nuestros profes: Mariela, Lila y Sergio. Al día siguiente voy con Cristina a ver The Caretaker de Harold Pinter porque Manuel no se pudo levantar. El lunes doy asesoría a una de mis alumnas sobre los acentos en el español, luego voy a la última clase con Antonio y de ahí vamos todos a la lectura final, tristes y alegres a la vez. La lectura sale muy linda, luego nos invita Lila a su casa. Vienen a verme Melina, Stalin, Anna y Patty y eso me hace muy feliz. El martes descanso casi todo el día, a la noche vamos con Salva a la despedida de la ópera, vemos The Makropolus Case, una ópera moderna en checo que nos gusta bastante, excepto por los largos descansos que nos cansan. El miércoles cierre del semestre, tomamos examen en la mañana, pasamos las notas. Aprovechamos de recoger nuestras entradas para la graduación, también el ajuar del graduado (que no sabemos cómo ponernos), vamos al yoga y de ahí a la celebración del fin del semestre. Hay menos gente, me parece que hay menos gente cada año. Regreso a casa a ponerme al día en mil pendientes triste por estos festejos y despedidas, aunque también contenta pensando en el futuro.