Esta semana hubo una pequeña muestra de cine chino en el Centro Cultural de Católica, que lamentablemente tuvo poca afluencia, quizá en parte porque las proyecciones eran en DVD y la calidad de la imagen no era demasiado buena. Sin embargo, aunque ello no dejaba apreciar la fuerza del cine chino en todo su esplendor, al menos nos mostraba algo de lo que se está haciendo últimamente, que en nuestra bastante mediocre cartelera, es algo ya de por sí bueno.
Pude ver La búsqueda de Zhang Yimou, director chino que ha tenido más difusión en nuestro medio y que es sin lugar a dudas uno de los grandes directores de la actualidad. Una de sus películas más famosas fue Héroe porque estuvo nominada al Oscar como mejor película extranjera, pero también ha hecho Camino a casa, Ni uno menos, La casa de los cuchillos voladores, en todas ellas el color, la música, la historia y esa magia de la cultura oriental son magistrales (varias de las cuales se vieron en la Filmoteca de Lima en el Museo de Arte, en esa época de efervecencia del cine que pudimos gozar hace algunos años y que no ha logrado remontarse). En ese sentido, en el aspecto más visual quizá esta película sea menos espectacular, pero no por ello menos conmovedora, sencilla y profunda. La historia, una historia de amor, es la de un padre que se ha peleado con su hijo y que quiere retomar comunicación con él dado que sabe que tiene una terrible enfermedad. Iniciará una búsqueda de sí mismo para encontrar el camino hacia el corazón de su hijo.
También pude ver La boda de Tuya, una película bellísima que muestra toda una cultura distinta, la de los mongoles. Está dirigida por Quanan Wang y fue Ganadora del Oso de Oro en el Festival de Berlín. Es la historia de una mujer, Tuya, campesina con dos hijos y un esposo que ha quedado inválido al querer cavar un pozo de agua. Ella sola debe sacar adelante el duro día a día en el campo, en un clima azotador. Pero el trabajo será demasiado y ella se verá afectada en su salud, así que la única solución parece conseguir otro marido, alguien que la pueda ayudar y que acepte a sus hijos y al padre de los mismos. Tuya es una mujer maravillosa, fuerte, valiente, bella. Es una película que reconforta al tiempo que demuestra algunos de los problemas que pasan las mujeres en geografías y realidades difíciles y agrestes. Todavía pasarán algunas películas más, sin duda de visión obligatoria.
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