viernes, 29 de octubre de 2010

Amigas y cine


El lunes estuve leyendo los textos para mi clase de la próxima semana. Pasé por casa de Gaby a dejarle las llaves de su casa, las que me dio para traer algunas cosas de Cuernavaca. De ahí fui a encontrarme con Rubí en el metro Copilco, almorzamos en el Monte Kailas, muy rico. De ahí nos fuimos a Coyoacán a dar una vueltita y terminamos en mi casa tomando cafecito y conversando. Al rato llegó Jaime y cambiamos el cafecito por cervecita, de ahí llegó Rubén y nos animó a ir al sushi roll. Así que ahí estuvimos los cuatro conversando y riéndonos mucho. El martes seguí leyendo y trabajando, me fui a la una a almorzar con Elo que preparó una rica comida, como siempre, esta vez nos acompañó Rogelio también. Fue entonces que me contó del ciclo de documentales y de la retrospectiva de Kim Longinotto (en la foto), así que regresé a casa un rato y de ahí me fui para la cineteca. Saliendo del metro me encontré con Rosana. Acabando el cine llegó Rubén y vimos Fines de agosto, inicios de setiembre de Assayas. El miércoles estuve aquí con las lecturas, pasó la mamá de Elvix a dejar unos encargos. Después me fui a Lacomer por algunas cosas, es mucho más barato en miércoles de plaza. Me llamó Oli para que la ayude y me fui a su casa, hice visita de médico porque me esperaba Claudia para almorzar. Así que me fui a la Unam en el metrobus, fui bastante violentada en el trayecto, muchos roses y apretones dudosos. Almorzamos en la cafetería de diseño, recuperé algunos libros. Regresé a casa a trabajar un ratito más y me fui para la cineteca a seguir con los documentales, acabando vimos con Rubén El vuelco del cangrejo que no la había visto en Lima en el festival. De Longinotto vi El día que no olvidaré y Los chicos de Shinjuku, de los que pronto haré una nota. El jueves me fui temprano a anillar mi tesis para dársela a Coral Bracho. Estuvimos un buen rato conversando muy a gusto. De ahí me encontré con Paty para almorzar, la llevé al Papalotl. Luego fui a despedirme de Oli, estaba un poco cansada y ya no fui al otro documental de Longinotto. En la noche me encontré con Rubén en la Rosario Castellanos, compré algunos libros. Fuimos por unos alambres vegetarianos al Tizoncito y por ahí pasó Elo y Rogelio, pero se iban al 10. Pasé a despedirme de ellos luego y regresé a casa después de una larga caminata. El viernes en la mañana pasó la suegra de Ximena a dejar unos encargos, de ahí me fui con Gaby y Fernando a desayunar a su casa, estuvimos conversando un buen rato. Regresé a casa para preparar todo, mis maletas y otras cosas antes de partir en un viaje relámpago a Acapulco.

martes, 26 de octubre de 2010

La boda de Gaby


El viernes en la mañana me voy a la boda civil de Gaby que se realiza en la delegación en Av. Patriotismo. Paso primero por casa, conozco a la familia de Fernando que está ahí. Nos vamos caminando hacia la delegación, les toman los datos y tenemos que esperar. Hace un sol intenso y mucho calor. Fernando va ya con su traje escocés. Es gracioso porque como se acerca día de muertos la delegación está adornada con catrinas y hay una parejita de novios catrines vestidos igual que ellos. Vaya con la simbología. Pasamos al salón de actos, les dan el discurso y firman y están casados ante la ley. Me emociono mucho. Volvemos a casa pero empiezan pronto a empacar para ir a Cuernavaca así que yo me voy a mi cita con chava.
Me corto el cabello, de ahí paso también a hacerme las manos y los pies, pero voy a un lugar que al final no me gusta mucho, pero me animo por un esmalte rojo. Regreso a casa y vamos con Rubén a almorzar al Asian Bistro, al rato nos alcanza su papá con la buena noticia de que consiguió un nuevo trabajo.
Nos vamos para el centro, hacemos cola en el Salón Corona, como siempre. Nos dan mesa, llega Paty al instante, luego Dan, Valmi, Ybeth, Cynthia, Lizz. Necesitamos una nueva mesa. Paty prueba la torta al pastor que ahí es excelente. Yo me como una quesadilla. De ahí nos pasamos al Tenampa, antes damos vueltas por Madero que ahora es peatonal, aunque le han quitado los adoquines y no me gusta tanto. Previo nos encontramos con Rocío y Cuahutémoc, que medio se perdieron y estábamos preocupadas. Así que está la colonia peruana en pleno: Ybeth, Paty, Rocío y yo. En el tenampa nos dan un buen lugar, allá llega Alonso. Estamos un rato, pido la canción de Mujeres divinas, pero ya no nos alcanza para más. Paty se toma foto con los mariachis y dice que son muy chaparritos. Llega el de los toques y se animan, yo no. A Paty no le gusta. Y de ahí ya nos vamos porque mañana tenemos que salir temprano.
Nos encontramos con Paty en el Sanborn's de Insurgentes para desayunar, como molletes, pero ella al final no quiere desayuno típico porque es muy pesado y sí lo es. En la carretera hace mucho calor, vamos oyendo un disco de los fenómenos del rock, pero que sólo se restringe a: Café Tacuba, Jarabe de Palo, Héroes del Silencio, Bunbury, Maná, Caifanes, es decir, un poco sesgado, falta lo menos Soda Stereo. En el centro de Cuernavaca siempre hay mucho tráfico, dejamos a Paty ahí y nos vamos a La Comer a comprar. Nos perdemos para llegar a la casa de la fiesta, dejamos las cosas y regresamos a comer por Paty pero vamos a un lugar que el servicio es pésimo y se demora una eternidad. Al regreso nos volvemos a perder y llegamos un poquito tarde otra vez, así que no nos da tiempo para cambiarnos ni nada porque la ceremonia ya empezó, snif. La ceremonia es muy bonita, realmente muy profunda, se dicen cosas muy sinceras, Gaby y Fernando están muy emocionados.
La fiesta transcurre tranquila y sobran muchas cervezas. Al día siguiente estamos ahí conversando con todos en el solcito, nos vamos llevando algunas cosas que dejamos en Mixcoac, pasamos al súper y de ahí recogemos a Mario para ir con Margarita. Allá están todos, incluidos los gemelos. Soplamos las velitas por Alex y Pepe y tenemos bufet de postres. Regreso agotada, sólo para llamar a mi papá, saludar a mi hermana por su cumple y caer muerta al sobre.

jueves, 21 de octubre de 2010

México lindo: primeros encuentros


Después de estar encerrada todo el fin de semana, el lunes otra vez tengo clase de observación, muy buena. No puedo evitar volver a leer mi texto antes de imprimirlo, sigo corrigiendo. Me calma que tengo ahora la historia un poco más clara y creo que a los personajes también, pero de todos modos someterse a la crítica es difícil. Martes, día extenuante. Voy a hacer lo del seguro social, la guerra ha sido vencida, regreso con el papel y resulta, que el premio, como diría Varela, era otra carrera, me faltan trámites de taxes, plop, eso será para mi regreso. Hago la impresión, compro algunos suouvenirs, cargo el paraguas y mi almuerzo todo el día, más las copias. La clase es muy polémica y nunca hay tiempo suficiente para dialogar. Luego Diamela diciendo que evitemos lo epígrafes en esta etapa de la creación porque pueden ser limitantes y mi texto ya trae tres, no puedo cambiarlo a esas alturas. Termino de hacer maletas, de copiar archivos. Me duermo mal que bien, me levanto a las seis, hago el tramo hacia La Guardia, con miedo, es la primera vez. Llego a tiempo, espero mi avión. Hay un poquito de atraso en Houston pero llegó a las 5:30 a México. ¡Hola México lindo!

Me reciben los papás de Rubén, hace un calor insoportable y yo sudo como chancho, como siempre. Llegamos a casa después de una buena hora en el tráfico. Llega Rubén y nos vamos al sushi, mi favorito. Paso por Lizz pero nada me convence del todo. Llamadas para organizar el día siguiente. Veo a Oli en la mañana y a Elo en la tarde. Largas conversan que sin duda no lo agotan todo. Felizmente me queda un vestido rojo de Oli y unos zapatos negros de Elo, joyas mixtas que ambas me prestan y ya estoy, me ahorré de comprar algo nuevo y apurada. Muchas voces conocidas, aromas, sabores, es tan lindo volver al hogar, uno de tantos de los hogares en los que hay abrazos y besos y mucho mucho cariño. En la foto con mi bella Elo que me hizo una comida deliciosa y nos acabamos la botella de vino.

sábado, 16 de octubre de 2010

Esto de ser escritora


Esto de ser escritora es muy estresante. Una semana agobiada entre las clases, las lecturas, las observaciones de español, cocinar, hacer compras, pasar por la fruta, llegar a la hora, ayudar a Marguerite a archivar, lavar ropa, empezar el trámite para el seguro social, ¡otro trámite!, prepararme para el viaje, dejar mi texto para la semana siguiente, andar el paraguas, perseguir el sueño. ¿Y escribir cuándo, cómo, por qué? Un café sigue siendo una batalla con el tiempo, las diferencias, las opiniones, el silenciador del celular nos ha dejado mudos a todos. Comer sin hambre, salir con sueño, dormir con demasiados pensamientos en mente.

Voy a dos eventos del programa, una conservación entre escritores argentinos: Silvia Molloy, Arturo Carrera, Vivi Tellas. Muy interesante y estimulante. Luego un recital sólo de Arturo Carrera. Cóctel, vino, galletitas con queso. Una salida sorpresiva, cervezas van y vienen. Diamela me hace un montón de críticas a mis textos, justo en la llaga. Mi prima Kathy iba a venir de Canadá y cancela, me quedo encerrada para evitar la ventisca de fuera, por dentro, a soplar palabras, a crear, a construir con letras, escribir. ¿Vale la pena? Una libra de confianza, dos dólares de seguridad, una cajita de frescura. Esto de ser escritora es muy estresante.

Quise decirte unas palabras más. Pero al hablar
no supe
y no sé
y pasan los instantes con estos copos ligeros.

Arden y nos derriten
las cosas que no decimos.

Fastos. Arturo Carrera.

En la foto, escultura de Elo Vega.

martes, 12 de octubre de 2010

Lo sublime y lo mundano


La semana empezó con mucho cansancio después de la maratón de películas anterior. Así que el lunes fui un ratito a la universidad, al internet y a una clase que tenía de biblioteca y de ahí me fui a casa. Acabé de leer La casa verde. El martes tuve mis clases regulares, estuve en la mañana leyendo y después de almuerzo me fui a la universidad. Llegué cansada pero también con mucho entusiasmo así que me puse a escribir un rato. El miércoles tuve clase de observación en la tarde y en la noche me fui al cine, finalmente me aventuré a ir yo solita, fue una película bellísima llamada El extraño caso de Angélica de Manoel de Oliveira, de quien también vi La carta. Ambas son como cuadros, la fotografía es simplemente sublime. Así que salí contentísima por haber roto la barrera de no poder ir al cine sin alguien y por esta bella experiencia con la película. El jueves cociné temprano y me quedé en casa trabajando y leyendo todo el día. En la tarde me fui a ver Venus Noir de Sara Baartman, una película muy polémica de la que ya haré una nota, pero en el diálogo dos personas tuvieron un pequeño altercado. El viernes me fui tempranito para la universidad porque tenía clase de observación, me perdí un poco pero llegué a tiempo. De ahí me fui a casa de Mariela a almorzar, fue un largo camino pero llegué sin mayores problemas. Almorzamos con una amiga suya, Irma, muy simpática, también peruana, así que el tema giró por esos lares. De ahí nos fuimos al Brooklyn Academy of Music (BAM) pero calculamos mal el tiempo y casi no llegamos, pero llegamos a las justas. Vi la obra de Pina Bauman, Full Moon que es sublime (también haré una nota sobre esto). Para contarles un poquito no más había lluvia en el escenario y un lago y un roca, la mezcla entre música, agua y danza era simplemente cautivadora, como estar enamorada. Así que salí en éxtasis total. Me fui a casa, iba a pasar Mikaela pero al final no pudo. El sábado me fui al cine en la mañana a ver una pélícula de Kelly Reichardt, Meek´s Cuttof, que era sobre unos peregrinos, estuvo interesante, pero nuevamente el inglés me falla un poco todavía. Almorcé en casa y en la noche me fui a casa de los abuelos de Mikaela para festejar su cumpleaños, fuimos a cenar comida coreana que estuvo muy rica y de ahí soplamos las velitas en casa. La velada estuvo muy bonita (foto). El domingo me fui tempranísimo a casa de Gabriela, la ayudé con las compras y de ahí me fui a conseguir entradas para Misterio en Lisboa de Raúl Ruiz. Vi la película con Mariela, fueron cuatro horas y media muy interesantes, la fotografía y la trama es cautivante, aunque me gustó más la primera parte. De ahí vino el diálogo y al final nos fuimos con Mariela y Melina a tomar un traguito, se juntó más tarde Claudia y así que pasamos una linda velada. Después de un fin de semana tan intenso quedé un poco mal de la garganta, porque en el cine ponen el aire acondicionado tan alto y pues el lunes que era feriado aquí me quedé en casa leyendo tranquila, juntando fuerzas para otra intensa semana.

jueves, 7 de octubre de 2010

Premio FemTV y SapoTV 2010


Nuevamente, se inicia el concurso organizado por Calandria, Flora Tristán, Milenia Radio, Manuela Ramos y Demus para elegir tanto la publicidad innovadora como la más sexista, la competencia es dura, así que a votar.

lunes, 4 de octubre de 2010

Gabriela, Jean y sigue el cine


La semana estaba pronosticada para ser lluviosa y así fue. El lunes salí temprano a pagar mi celular porque no pude hacerlo por internet, pasé por el banco por un cobro no explicado, tuve una clase en la biblioteca, muy interesante, me hicieron un tour por las instalaciones, siempre hay nuevas cosas que conocer. En la tarde fue el taller con Miguel Nieto que venía del programa de escritura creativa de la Universidad de Sevilla. Lo mejor fue que para ese curso leímos el poemario de Fonollosa, Ciudad del hombre: Nueva York; aunque es evidentemente androcéntrico, tiene cosas interesantes. Los ejercicios del taller me parece que pudieron organizarse mejor y quedaron muchos temas para discutir que se abrieron pero luego no se dio tiempo para entablar un diálogo. Luego fue la conferencia sobre lingüística, estuvo interesante, creo que entendí la mayor parte de la lectura. Al final hubo vinito y bocaditos que siempre se agradece. Pensé en hablar con Inés pero al final no se conectó. El martes pasé por la bendita carta de presentación para el banco, que felizmente me dieron en un santiamén y ya al parecer no hay nada pendiente con ellos. Tuve mi clase con Diamela y con Sergio, interesantes ambas, aunque a veces siento que Sergio no da mucho espacio para las opiniones y dado que eso es parte de la calificación, es extraño. En la noche hablé con Inés un buen rato, con Oli, como lo hice tomando cervecita y comiendo bocaditos creo que me puse un poco borrachita. Ese día llegaron Marguerite y Reid a casa y entonces la dinámica cambió empezando porque ya no tenía acceso a internet. El miércoles estuve leyendo en casa, almorcé, de ahí me fui a reunirme con la señorita de los pagos, llené varios formularios y finalmente me dieron mi cheque, menos una tajadota de impuestos que te quitan. De ahi fui al cine con Melina a ver la última película de Godard, Film Socialisme, que calificaron como una "fructífera catástrofe" y estoy de acuerdo con esa opinión. Esto fue al final, que estuvieron representantes de importantes revistas de cine debatiendo. La película no sé por qué se llama así porque son escenas aparentemente inconexas y la traducción en vez de ser literal sólo señala una que otra palabra, así que es bien difícil de llevar las dos horas de duración. Acabando fuimos con Melina a tomar una cervecita pero yo me fui al toque porque además de que es caro estar saliendo fuera estaba muy cansada. El jueves estuve trabajando en casa hasta el almuerzo, de ahí me fui a la universidad a entrar a internet. A las 6pm me encontré con Jean Franco. Es una persona muy atenta y muy amable, hablamos con total confianza y simpatía y me invitó a un restaurante italiano a cenar, que me gustó mucho. Charlamos ampliamente sobre todo un poco, rondando siempre la literatura. De ahí me regresé caminando a casa e hice algunas compras. El viernes fue mi primera clase de observación, visité a Laura en su clase de español. Antes de eso nos juntamos con Elvira para almorzar, pero igual como siempre un poco apurado, pero al menos nos pusimos un poco al día de las novedades. Después de la clase pasé a mi casa por una casaca porque estaba lloviendo fuerte y de ahí conocí a Gabriela Mora. Es una persona también muy amable que me hace recordar mucho a mi tía Jesús, por su contextura, incluso su casa tiene un aroma que me recuerda al de la casa de mi tía en Jesús María. Le ayudé con las compras, ya es una persona mayor y enferma y hay cosas que no puede hacer, compartimos un tecito con galletitas muy animado. Regresé a casa a leer, empecé con La casa verde. El sábado me levanté temprano, en parte porque Reid se levanta también temprano y prende la tele. Salí a montar en la bici un ratito, aprovechando que no había lluvia, pero el aire ya había cambiado y hacía mucho frío y con la velocidad me golpeaba el rosto y las manos y me dolía. De ahí fui al cine y vimos la película Carlos de Olivier Assayas. Ahí me enteré que duraba cinco horas, fue una sorpresa, así que al final acabé agotada. Se narra la historia de Carlos Ramírez, un terrorista que es parte del movimiento internacionalista de revolución. La película da para reflexionar mucho sobre el tema de la política y los ideales revolucionarios. Al final estuvo el director y los actores y se hizo un diálogo. Llegué a casa a comer lo que tenía muerta de hambre. El domingo me dio flojera salir con la bici, el clima ya estaba mucho más frío. Fui a comprar entradas y encontré felizmente para Certified Copy de Abbas Kiarostami. Me gustó mucho la película, era de una pareja y sus entretelones, un intelectual inglés y una catedrática francesa. Juliete Binoche en el papel excelente, como siempre. Se parecía a la película de antes del amanecer, que luego siguió antes del anochecer, pero ahora quince años después, cuando son mucho más maduros. En este caso la pareja tenía quince años de matrimonio. Comimos con Melina en un lugar chino, yo tomé una sopita para el frío. Regresé a casa a leer y luego fuimos a ver The Social Network de David Fincher pero todavía tengo que saber más inglés porque hablan tan rápido que no entiendo más que por el contexto y se me pasan varias cosas. Regresé a casa, hablé con Rubén y con mi papá. Todavía no se sabe si ganó Susana aunque las encuestas dicen que sí, pero la diferencia es muy estrecha. Confío en que sea nuestra próxima alcaldesa.